Desde 2015, cada 26 de septiembre se celebra el Día del Dumpling, uno de los bocados asiáticos de comida callejera que más se come en todos el mundo. La historia del dumpling suele remontarse—según la tradición— a más de 1800 años cuando el médico chino Zhang Zhongjing habría preparado piezas de masa rellenas para aliviar el frío y las congelaciones de sus pacientes durante la dinastía Han Oriental.
Como categoría culinaria, el “dumpling” no tiene una única cuna. Por su sencillez de su composición: masa, relleno a elección y cocción hervida o al vapor, pudo haber evolucionado de manera independiente en varias regiones, y luego viajó y se mezcló con rutas comerciales como la de la Seda. El jiaozi es el dumpling chino por excelencia: masa de trigo sin levadura rellena y plegada en media luna, cocida hervida, al vapor o a la plancha, y servida con vinagre negro y salsa de soja.
En Japón, la gyōza desciende del jiaozi, pero se volvió propia en la posguerra de la Segunda Guerra Mundial (desde 1945): el auge de casas de fideos y comedores impulsado por repatriados japoneses desde China —en particular, Manchuria/Noreste de China (ex Manchukuo) popularizó la versión salteada-al-vapor; su masificación en los años 50 consolidó rasgos locales como masa más fina, plancha y dip de vinagre y soja.
En Corea, el mandu se asocia al intercambio con el mundo mongol durante el período Goryeo (siglo XIV) y pronto ingresó a la cocina cortesana y festiva: convive en caldos como el manduguk de Año Nuevo lunar (Seollal) y en variantes según estación y región —desde rellenos vegetarianos ligados a la tradición budista hasta versiones con pescado o ternera—, consolidando un repertorio propio dentro de la gran familia de los dumplings.
En la cultura pop, escenas como el “entrenamiento por dumplings” en la saga animada Kung Fu Panda ayudaron a la difusión global del imaginario, aunque la popularidad actual responde más a la expansión de cocinas chinas y panasiáticas en ciudades de Occidente que a un solo fenómeno mediático. El Día del Dumpling se celebra cada 26 de septiembre y nació en Estados Unidos en 2015, cuando la empresa neoyorquina TMI Food Group registró la efeméride ante National Day Calendar.
1) KOI Dumplings
Hace ocho años, un grupo de amigos volvió de un viaje por Estados Unidos fascinado con los dumplings y decidió abrir un street food asiático en Buenos Aires: así nació KOI Dumplings, pionera en ofrecer piezas tradicionales. El crecimiento fue sostenido y hoy producen más de 60.000 unidades por mes; a la carta se sumaron sabores como res estilo bulgogi, langostinos cocidos sous vide con manteca de miso y una versión veggie con kimchi y provoleta fermentada, además del clásico de cerdo. “Los dumplings son más que un plato: son un gesto de hospitalidad, algo que se comparte en familia, con amigos y en la calle. Compartimos ese espíritu y eso es algo universal, por eso el mundo lo adoptó como un sabor propio y eso explica el éxito y crecimiento que hay en Argentina”, asegura Juan Manuel López, cofundador de KOI Dumplings. El 26 de septiembre, por el Día del Dumpling, habrá DJ set y yatai en la puerta del local de El Salvador 5602: a partir de las 20 se regalarán 50 platos a las primeras 50 personas y habrá 25% de descuento en toda la cadena.
2) 10 Recetas Japonesas (Mercat Villa Crespo)
Las gyōzas, que llegaron junto al sushi y otras propuestas niponas, tendrán homenaje el 26 de septiembre en Recetas Japonesas (Mercat Villa Crespo): ofrecerán una promoción en la que todos los platos saldrán acompañados por 2 gyōzas de regalo (cerdo o vegetariana, a elección) para que más público pruebe el bocado más popular de Oriente.
3) Una Canción Coreana
En Corea, los dumplings adoptaron el nombre mandu y se cocinan al vapor, fritos o en sopa, una versatilidad que explica su arraigo cotidiano. En el tradicional restaurante Una Canción Coreana se ofrecen las tres variantes con rellenos de kimchi y carne; el viernes 26, cada comensal recibirá un mandu de cortesía —a elección— para celebrar la fecha.
4) Otaku Sushi
La cadena de sushi libre celebra el Día del Dumpling con una promo para pedidos online: el viernes 26, quienes compren a través de su sitio accederán a 40% de descuento en las gyozas; las porciones de 5 unidades quedan a $3000 en sabores de pollo al curry o cerdo.
5) Hanok (Thames 1780, Palermo)
El restaurante de cocina coreana casera invita a celebrar el viernes 26 con un gesto simple y festivo: a cada mesa se la agasaja con una mini sopa con un mandu de carne de cortesía, perfecto para introducirse en este clásico de la gastronomía coreana.
6) HAN
“El Mandu (dumpling coreano) que presentamos en Han está relleno (por ahora) de lengua de vaca, cocida lentamente en salsa de soja, jengibre, especias y ají picante. La masa, elaborada con una mezcla de féculas y lardo, logra una textura suave pero resistente, que envuelve con delicadeza el relleno. Se sirve en un caldo a base de baek-kimchi (kimchi blanco) y frutas, que aporta acidez fresca, profundidad y una complejidad aromática única”, dice el chef Pablo Park. Este plato se inspira en tradición y estética: los colores y la sutileza evocan las túnicas del hanbok, y el mandu aparece en festividades como Seollal (Año Nuevo Lunar) y Chuseok (fiesta de la cosecha), donde la preparación suele ser colectiva. “En Han reinterpretamos este símbolo cultural con nuestro propio lenguaje o visión. El uso de productos locales se entrelaza con técnicas coreanas (fermentación, caldos claros, condimentos aromáticos), generando un puente entre lo nuestro y lo que heredamos. Con este plato buscamos transmitir no solo sabor, sino también memoria, ritual y la delicadeza, preservando y reinventando las raíces”, dice el chef Pablo Park.
7) Apu Nena (Aguirre 1600)
La chef Christina Sunae resume por qué sus dumplings son un hit de la casa: “Nuestros dumplings son el plato más vendido de la carta. Masa casera rellena de cerdo, langostinos y shiitakes, con salsa de soja china y toyosuka, soja con vinagre y jalapeños infusionados. Comer un dumpling en ApuNena es como sentirte como un niño”.
8) Fukuro Noodle Bar
“En Fukuro Noodle Bar, la experiencia comienza con un bocado que resume nuestra filosofía: sabor, calidad y elaboración artesanal. Se trata de nuestros dumplings, preparados a diario en dos versiones que se han consolidado como los acompañantes ideales antes de un bowl de ramen. Desde la apertura del restaurante, hace 12 años, nuestro “Piggy Style” relleno de cerdo con salsa de caramelo y jalapeños, se ha mantenido como un clásico de la casa, mientras que sumamos también el “Yasai”, relleno de berenjena, hongos y garbanzo con una salsa cítrica, completamente vegetariano, para ampliar la propuesta, como una opción fresca, ligera y equilibrada. Cada dumpling se hace a mano, uno por uno, siguiendo la tradición de la cocina asiática y el cuidado por los detalles que caracteriza nuestra propuesta. Son el comienzo perfecto: pequeños bocados que despiertan el apetito y preparan el paladar para el viaje de sabores que continúa con nuestro ramen”, cuenta Alejandro Osuna, chef y uno de los dueños de Fukuro.